Wednesday, April 10, 2013

Wednesday, October 26, 2011

CRISIS ECONÓMICA 2008-2011 Y RIESGO MORAL: UN CASO DE ÉTICA DE LOS NEGOCIOS Y DE CONFLICTO DE INTERÉS


Gabriel Jiménez Peña

Resumen: El presente artículo se propone ofrecer un punto de vista respecto de la crisis económica que se ha producido en los últimos años desde el enfoque del riesgo moral y de la ética de los negocios. Para ello, se presentan los siguientes acápites: (I) la crisis económica y sus consecuencias globales, (II) Crisis, riesgo moral y conflicto de interés, (III) conclusión.
Palabras clave: Crisis económica 2008-2011, riesgo moral, ética de los negocios, capitalismo corporativo.
Clasificación JEL: A13, G01
Abstract: In this paper I purpose to offer a point of view about the economical crisis of the last years from the moral risk and the business ethics approach. With this objective, the paper presents these sections: (I) Economical crisis and global consequences, (II) Crisis, moral risk and interest conflict, (III) conclusion.
Key words: economical crisis, moral risk, business ethics, corporate capitalism.
JEL Clasification: A13, G01

Para nadie es un secreto que en los últimos 5 años ha tenido lugar la mayor crisis económica global de que se haya tenido noticia. Economías como la islandesa, la irlandesa, la griega, la italiana, la española y, en particular, la norteamericana se cuentan dentro de las más afectadas. Y todavía actualmente podemos hablar de crisis, por cuanto tiene que ver con el tope de la deuda que ha alcanzado la tanto la economía norteamericana como las economías europeas, y dadas las constantes alarmas de recesión de la economía mundial llevadas a cabo por el Fondo monetario internacional. Ante este fenómeno surgen preguntas para las cuales no se han dado aún respuestas satisfactorias en nuestro medio académico. Por ejemplo, ¿cómo es posible que la crisis se haya desplazado de su centro, la crisis del mercado de capitales norteamericano, a otras economías como la de Grecia, Islandia, Irlanda, España y que aún no se haya podido contener?, Y las qué más nos interesa en este escrito, ¿qué fallas de tipo ético pueden causar una crisis como la que tanto preocupa al mundo?, ¿qué tipo de economía ha causado estos indeseables efectos?
(I)
Una crisis económica, como la de 1929, conocida como la ‘gran depresión’, y desde el punto de vista macroeconómico, podía ser explicada desde el punto de vista del nivel de precios, bien por su caída excesiva o recesión, como la de 1929, o por su aumento excesivo o inflación, como la crisis de 1979-1982 (Krugman, 2007, p. 245). Pero una crisis económica también puede ser descrita en términos de su relación con las crisis financieras. Hemos descubierto que la creciente interconexión de los mercados financieros y que en ellos se produzca una crisis, en apariencia suave y controlable, puede llevar a una crisis económica global (Mishkin, 2010). Veamos, específicamente, cómo se produjo la crisis económica de los últimos 5 años.

Las deudas acumuladas por los norteamericanos en hipotecas y créditos desde 2007 tuvieron un efecto estruendoso en el mercado de capitales de la Nyse (New York Stock Exchange), y todavía se pueden sentir sus efectos en los mercados financieros globales. En primer lugar, Wall Street sufrió la más grande crisis financiera conocida. La banca de inversión que ha tenido su abrigo en esta bolsa de EEUU hizo agua, como se puede ver en el documental, tan premiado y conocido Inside Job: bancos en bancarrota, vendidos por una poco representativa parte de su valor anterior o, en el mejor de los casos, reinventados en tanto instituciones financieras. La compañía de seguros más grande de ese país AIG, las compañías hipotecarias Fannie Mae y Freddie Mac y la más grande de ahorros y crédito Lehmann Brothers, fueron intervenidas por el gobierno norteamericano para evitar pérdidas mayores.

Esta crisis tuvo su causa, sostenemos, en un previo auge y caída: la de la burbuja tecnológica de comienzos del segundo milenio. No es gratuito que dicha crisis también haya tenido hasta cierto punto su origen en un problema de ética de los negocios. De hecho, uno de los casos más estudiados en esta disciplina es el de Enron, en el cual se muestra que hubo complicidad de la banca de inversión: J. P. Morgan, Citigroup, Merryl Lynch facilitaban préstamos a Enron, que ésta, a su vez, usaba para pagar otros préstamos anteriormente recibidos y para financiar los proyectos de inversión que reclamaban liquidez inmediata, llevando una doble contabilidad en sus libros.

Ahora bien, cuando el mercado de capitales colapsó en el 2000, en parte gracias a la crisis de Enron, y Norteamérica cayó en una recesión el año siguiente, y en parte también por los hechos de septiembre 11, la Reserva Federal (Federal Reserve) bajó las tasas de interés a su límite más bajo (1,7 %), para incentivar el consumo y crédito correspondiente. Dicha baja en las tasas de interés hizo más baratos, a su vez, los pagos de las hipotecas, lo cual a su vez llevó a un aumento de la demanda inmobiliaria, ocasionando una subida en el precio de estos bienes. Adicionalmente, millones de propietarios buscaron aprovecharse de esta coyuntura de descenso de las tasas para refinanciar su deuda, parte de la cual fue comprada por los bancos.

En 2004, la Reserva Federal vuelve a subir las tasas de interés con el propósito de controlar la alta inflación presentada ese año. Desde el 2004 hasta el 2006 la tasa de interés pasó al 5,25%. El crecimiento del precio de la vivienda, que había sido muy significativo entre los años 2001 y 2005, pasó entonces a un descenso sostenido. En el 2005 el precio de la vivienda y las ventas de dichos bienes cayeron de manera súbita. Los cobros jurídicos debidos al no pago de la deuda crecieron de forma incontrolable, y numerosas entidades comenzaron a tener problemas de liquidez para devolver el dinero a los inversores o recibir financiación de los prestamistas. El total de ejecuciones hipotecarias del año 2006 ascendió a U$ 1.200.000.000, lo que llevó a la quiebra a centenar de entidades hipotecarias en el plazo de un año. Para el 2006, la crisis inmobiliaria ya se había trasladado a la Bolsa: el índice bursátil de la construcción estadounidense el U.S. Home Construction Index cayó un 40%. Desde el año 2007 el problema de la deuda hipotecaria subprime se transmite definitivamente, entonces, a los mercados financieros internacionales.

Esta transmisión o contagio, se da a través de la sobrevaloración (burbuja) de los instrumentos financieros derivados conocidos como CDO (Collateralized Debt Obligation). Se trata de una cartera colectiva o colección (bundle) compleja de bonos, préstamos, obligaciones bancarias, que diversas instituciones convierten en activos negociables en el mercado de capitales y que recibieron, y ahí está el problema, por parte de las calificadoras de riesgo como Moody’s, Standard and Poor’s y Merril Lynch, la calificación de subprime, esto es, AA. Dada esta calificación, lo que ocurrió es que los inversionistas de otros países, como el caso de Islandia, compraron estos CDO, conocidos después como bonos basura (junk o trash bonds), dando por sentado que la calificación se ajustaba a una realidad técnica, y no a una mera opinión. De esa manera, entonces, se transmite la crisis financiera norteamericana a otros países: “las hipotecas se vendían a bancos más grandes, que creaban derivados financieros que vendían a otros bancos, que a su vez los empaquetaban en otros derivados y los volvían a vender. Así, se difundieron por todo el mundo. Las calificadoras de riesgo, contratadas por esos mismos bancos, certificaban su seguridad. No existía regulación sobre los derivados, los bancos de inversión que los generaban ni las calificadoras que los certificaban” (Ferrari, 2008, 57).
(II)
Ahora bien, resulta verdaderamente problemático y reprochable, desde el punto de vista ético, que tal crisis haya sido evitable, si el Estado hubiera regulado los mercados de derivados y, en particular, los CDO, pero más aún, que algunos hayan hecho grandes utilidades, con las pérdidas de otros. Esta es una situación que definiremos como de Riesgo moral (Moral Hazard) extremo. Según P. Krugman (2009) el riesgo moral, a secas, se produce en cualquier situación en la que una persona toma una decisión sobre qué tanto riesgo tomar, mientras que otra asume el costo si todo resulta mal. Nosotros queremos decir que la tesis principal que nos interesa defender en este artículo es que el riesgo moral extremo se produce si, además de la situación anteriormente descrita, esto es, x toma una decisión riesgosa e y asume los costos de la decisión tomada por x, x obtiene más utilidades o beneficios económicos por el hecho de poseer, digamos, información privilegiada. En otras palabras, el riesgo moral extremo se presenta cuando hay lugar al mismo tiempo riesgo moral y conflicto de intereses, que, defendemos, es lo que caracteriza a la crisis económica que ha tenido lugar en los últimos años.

Ahora bien, quien ha asumido el riesgo moral de la crisis ha sido el estado norteamericano y, en últimas, los contribuyentes con sus impuestos a través de las ayudas proporcionadas por el Tesoro. Se trata de la situación, bastante descrita, como “pérdidas públicas, ganancias privadas”. Esto es lo que hemos llamado riesgo moral extremo. Veamos cómo ocurrió esto en la crisis económica de que nos ocupamos.

Dado que la economía norteamericana pasó por tan mala coyuntura, el gobierno de EEUU interviene en el mercado a través de las ayudas conocidas como Bailout. El presidente Bush autoriza un paquete de ayudas, prácticamente un cheque en blanco al secretario del Tesoro, Henry ‘hank’ Paulson, por 700 billones de dólares, para que el impacto de la crisis financiera no fuera tan fuerte sobre la economía norteamericana. Sin embargo, el mismo Paulson años antes era miembro de la junta directiva de Goldman Sachs, una de las empresas que resulta beneficiaria de los bailouts, a través del programa TARP. Como lo reportó Bloomberg en su momento, los beneficios del Bailout, “en su actual forma, estarán limitados de manera importante a los bancos de inversión y a otros bancos que han reportado pérdidas en el valor de sus activos y ya han reconocido su incapacidad de atender a los capitales (Khanna, 2008)”

Pero esto no es lo más grave en este caso de conflicto de interés y crisis económica. Presumiblemente, y según trata de mostrar el documental Inside Job, durante la crisis hipotecaria subprime de 2007, Goldman Sachs fue capaz de hacer utilidades a través de la venta en corto de seguros de impago de hipoteca, esto es, a la vez que antes emitía bonos que después se convirtieron en bonos basura, fue capaz de apostar contra ellos mismos en el mercado, a través de los bonos de seguros de impago de la deuda de AIG, haciendo grandes ganancias, y ello, contra aquellos agentes económicos que depositaron su confianza en los CDO, y en las instituciones que los emitían.


Los ingresos de Goldman Sachs, después del colapso de 2008, se han prácticamente doblado, situándose siempre, después de la crisis, por encima de los 9 billones de dólares, hasta alcanzar, en el segundo trimestre de 2009, la suma de 12.78 billones de dólares, en tanto las utilidades netas, no bajan de 2 billones, y a finales de 2010 alcanzan la importante suma de 3.46 billones de dólares:

Gráfica 1. Ingresos y Ganancias de Goldman Sachs 2007-2010.

Fuente: Goldman Sachs, Gráfico: Los Angeles Times

De ahí que la SEC (Securities and Exchange Commission) actualmente esté procesando a Goldman Sachs por fraude. El problema de una institución como esta y como todas las de inversión, que también deberían ser investigadas, como J. P. Morgan y Citigroup, y el mismo Wallstreet, se centra en las bonificaciones de sus ejecutivos y en el aumento de su riqueza personal individual. Estos ejecutivos pierden los escrúpulos, incentivados perversamente por el ostentoso estilo de vida que pueden llevar con sus jugosas comisiones, y a cualquier costo, que generalmente, ellos saben y estiman, asume el público, crean instrumentos de deuda que sacan provecho de la desregulación. En Inside the Job, el mismo primer ministro chino se pregunta, ¿cómo es posible que un ingeniero de obras o civil, que construye puentes, carreteras, puede ganar 10 veces menos que un ingeniero finaciero, que sólo construye deuda, y especula con los sueños y expectativas del mercado? Con esto no decimos nada nuevo. Lo nuevo está en decir que esto es intrínseco al capitalismo y esa es nuestra conclusión.

(III)
El capitalismo corporativo multinacional puede ser descrito en términos de la cesión de poder que los Estados-nación han realizado a intereses privados que se imponen globalmente y que configuran un orden mundial en consonancia con esos intereses. De ese modo, mientras los bancos privados y sus ejecutivos, aumentan sus utilidades después de las crisis, quienes pagan las crisis son los contribuyentes de los países en crisis, a través del presupuesto y de la deuda pública. El punto a investigar tiene que ser cómo después de la crisis 2008-2011 ha aumentado o disminuido la concentración de la riqueza por quintiles y por decíles en Estados Unidos de Norteamérica.

Gráfica 2. Distribución del Ingreso en Estados Unidos de Norteamérica: actual (2010), Estimado, e Ideal.
Fuente: Norton & Ariely, 2010.

En la gráfica presentada se puede ver que el 20 % más pobre de la población, señalado con el color más rojo, posee tan poco de la riqueza en 2010, que no es posible siquiera verlo en el actual, pues el quintil más bajo constituye sólo el 0.1% de la riqueza, cuando el estimado por Census Bureau es del 3% y el ideal sería que poseyera el 10 %. Comparado este 20 % con el top 20, o el 20 % más rico, en color gris, este posee más del 80 por ciento de la riqueza. Por supuesto que ello tiene que configurar un nuevo horizonte investigativo, en el que se indague cuánta de esa riqueza, poseen en efecto, los ejecutivos de la banca de inversión. De manera que en el capitalismo corporativo hay intrínseco un riesgo moral. El problema no es que las pérdidas sean públicas y las ganancias privadas, sino que la brecha entre ricos y pobres se amplíe aún más después de las crisis económicas, por el efecto redistributivo que causa, que aún está todo por estudiar.

Bibliografía

-Ferrari, César. Tiempos de incertidumbre. Causas y consecuencias de la crisis mundial. Revista de Economía Institucional, vol. 10, Nº 19, segundo semestre/2008, pp. 55-78

-Krugman, P.R., Wells, R., Introducción a la economía: macroeconomía, México: Reverte, 2007

-Mishkin, F., Over the cliff: from the subprime to the global financial crisis, National Bureau of economic research, Cambridge, Massachusetts, December 2010. Disponible en: http://www0.gsb.columbia.edu/faculty/fmishkin/papers/nberwp.w16609.pdf

Artículos de Prensa:
¬
- Domhoff, G. William, Wealth, Income, and Power, September 2005 (updated July 2011). Disponible en: http://sociology.ucsc.edu/whorulesamerica/power/wealth.html. Consultado el: 4 de agosto de 2011.

-Khanna, Satyam, Conflict Of Interest? Report Says Goldman Sachs ‘Among Biggest Beneficiaries’ Of Paulson’s Bailout. En: Thinkprogress.com, Sep 22, 2008. Disponible en: http://thinkprogress.org/politics/2008/09/22/29590/paulson-goldman-bailout/

Thursday, August 04, 2011

Sobre la economía

La economía debe producir algo bello, sublime, y no algo exacto, científico. Debería aspirar a ser menos una ciencia y más a ser una de las artes de nuestro tiempo.

Monday, July 25, 2011

La pregunta por el ser

En nuestro tiempo, no se es lo que se hace, sino, en propiedad, lo que “los otros” digan, afirmen, estén dispuestos a creer sobre el ente en cuestión de su existencia.

Wednesday, June 08, 2011

La Crisis económica en Estados Unidos: el papel del gobierno norteaméricano

Las deudas acumuladas por los norteamericanos en hipotecas y créditos desde 2007 tuvieron un efecto estruendoso en la economía del segundo semestre 2008, primero de 2009, y todavía se pueden sentir sus efectos. Wall Street sufrió la más grande crisis financiera conocida después de la Gran Depresión. La banca de inversión que ha tenido su abrigo en esta bolsa de EEUU hizo agua, como se puede ver en el documental, tan premiado y conocido Inside Job: bancos quebrados o vendidos por una poco representativa parte de su valor anterior o, en el mejor de los casos, reinventados en tanto instituciones financieras. La compañía de seguros más grande de ese país AIG y la más grande de ahorros y crédito Lehmann Brothers, fueron intervenidas por el gobierno norteamericano, con el pretexto de evitar pérdidas mayores. la gran pregunta es: ¿por qué una institución desapareció, declarada en bancarrota, mientras la otra siguió existiendo? Algo tendrán que ver las causas de la crisis para intentar una respuesta.

La crisis tuvo su causa, lo cual no coincide con las hipótesis de Rajan y Acemoglu, sostenemos, en un previo auge y caída: la de la burbuja tecnológica de los 90. Cuando el mercado de valores colapsó en el 2000 y Norteamérica cayó en una recesión el año siguiente, en parte por los hechos de septiembre 11, la Reserva Federal (Federal Reserve) bajó las tasas de interés a su límite más bajo (1%), para incentivar el consumo y crédito correspondiente. Dicha baja en las tasas de interés hizo más baratos, a su vez, los pagos de las hipotecas, lo cual a su vez llevó a un aumento de la demanda inmobiliaria, ocasionando una subida en el precio de estos bienes. Adicionalmente, millones de propietarios buscaron aprovecharse de esta coyuntura de descenso de las tasas para refinanciar su deuda, parte de la cual fue comprada por los bancos.

En 2004, la Reserva Federal vuelve a subir las tasas de interés con el propósito de controlar la alta inflación presentada ese año. Desde el 2004 hasta el 2006 la tasa de interés pasó al 5,25%. El crecimiento del precio de la vivienda, que había sido muy significativo entre los años 2001 y 2005, pasó entonces a un descenso sostenido. En el 2005 el precio de la vivienda y las ventas de dichos bienes cayeron de manera súbita. Los cobros jurídicos debidos al no pago de la deuda crecieron de forma incontrolable, y numerosas entidades comenzaron a tener problemas de liquidez para devolver el dinero a los inversores o recibir financiación de los prestamistas. El total de ejecuciones hipotecarias del año 2006 ascendió a U$ 1.200.000, lo que llevó a la quiebra a centenar de entidades hipotecarias en el plazo de un año. Para el 2006, la crisis inmobiliaria ya se había trasladado a la Bolsa: el índice bursátil de la construcción estadounidense el U.S. Home Construction Index cayó un 40%. Desde el año 2007 el problema de la deuda hipotecaria subprime se transmite definitivamente, entonces, a los mercados financieros internacionales y la explosión de la crisis la estamos viviendo en este año 2008.


Ahora bien, las réplicas de esta crisis económica en el ámbito político no hicieron esperar. Dado que la economía norteamericana pasó por tan mala coyuntura, la incertidumbre reinó en el ámbito político. El Expresidente Bush autorizó un paquete de ayudas, contrariando el liberalismo político, para que el impacto de la crisis financiera no fuera tan fuerte sobre la economía norteamericana. Sin embargo, tales ayudas no fueron suficientes y ello propició que el tema de la crisis económica se desplazara al de las relaciones internacionales de EEUU, en la campaña política por las elecciones de noviembre de 2008. El conocimiento que los candidatos detentaron públicamente sobre el tema económico, particularmente en el primer debate, jugó un papel determinante en las elecciones. A su vez, es un hecho que los medios de comunicación terminaron por prefigurar la imagen de un Obama que buscó identificar la actual crisis con las medidas adoptadas por el gobierno Bush en el tema de hacienda, al que achacaría toda la culpa.


Lo que resulta curioso, es que Obama, no haya hechop nada para cmabiar efectivamente la economía de su país y haya nombrado de nuevo, por ejemplo, a personajes tan siniestros como Bernanke, en la secretaría del tesoro. Obama parece, no más que in títere de un puppetmaster cuyo rsotro aún está popr develar.

Entre tanto, quien tiene la última palabra de la intervención en la economía por parte del Estado, es el senado norteamericano. El debate estuvo puesto sobre la mesa: ¿debe intervenir el Estado en la economía? Las consecuencias de esa intervención se verán a largo plazo, pero como dijo el célebre economista J. M Keynes: ‘a la largo plazo, todos estaremos muertos’.


Wednesday, May 11, 2011

De la corrección política -Be polite o or political correctness

El torpe no sabe distinguir entre un ofrecimiento y una opción. Su caída es aparatosa, todo un estrépito !

Tuesday, May 03, 2011

Colombia: país de alias y eufemísmos

Seguramente Colombia debe ser el mayor productor mundial de apodos y renombramientos, vía medios de comunicación, de procesos judiciales.

Este es el país del olor de la guayaba, de remoquetes, alias, y eufemísmos pseudocortéses para alivianar el horror y para ocultar, detrás de supuestos nombres graciosos, hechos siniestros y horibles de la historia.

Eufemísmos para llamar delitos en Colombia: parapolítica (concierto para delinquir), yidispolítica (tráfico de influencias), Falsos positivos (crímenes de Estado), carrusel de la contratación (estafa, fraude al presupuesto público y soborno), carrusel de la salud (detrimento al erario público y estafa).

Entre los alias contamos: el mono Jojoy -que no es mono ni producía risa-, tirofijo -que seguramente sí debía hacer tiros fijos-, gordolindo - que era gordo, pero no lindo-, el patrón -el asesino más grande de la historia de Colombia-, jabón -el narco más sucio del cartel del norte del Valle-, monoleche -que no era mono-, Cuchillo -!!!-, macaco -vaya Ud. a saber por le decían como un chimpance-, entre otros.

¿Cuándo le llamaremos a las cosas por su nombre?, ¿Cuándo no nos dejaremos influir por los noticieros y los estúpidos nombres que le ponen a lo macabro de este país, que a veces parece hecho de cartón?