Monday, August 31, 2009

Wednesday, August 19, 2009

Tuesday, August 11, 2009

Reflejos y espejos

El reflejo es una medida del espejo.

Saturday, August 01, 2009

Ideas sueltas para una novelita ejemplar

LA DECADENCIA DE LA JUVENTUD

Capítulo II: En el que se narra cómo una adolescencia sin mujeres lleva a una juventud decadente

Habría querido sublimar, o tan solo mostrar su inconformidad con los hechos precedentes, pero no le quedaba más que un reducto de orgullo que confundía con la dignidad, pero que le permitía aparecer delante de ella con un aire estoico que él creía que ella admiraba –no había cosa que ella repudiara más que ese último recurso vulgarmente histriónico. La actitud de ella en cambio era de entera satisfacción, se sentía serena e impasible, más allá de todo estoicismo, más allá de toda exigencia de calma y tolerancia, al punto que se daba el lujo de preguntarle qué le ocurría, si estaba molesto, como ignorando lo sucedido entre los dos. Minutos antes estaban juntos compartiendo una canoa, [...] . Analogía: La vida es como un desierto, el amor es como un espejismo, en el desierto a veces hay oasis y a veces solo espejismos, pero todo comienza con la certeza que empuja al hombre a ir en pos de lo que cree que es un oasis. Y es que así se había dejado ver siempre la esencia del amor […]

El hombre es un lobo para el hombre, sostenía Hobbes. Eso es demasiado para el hombre, supone un instinto sublime, una necesidad de sobrevivir que el hombre mismo no comprende, que está más allá de sí, porque la rapacidad con la que actúa no encuentra sosiego; los animales lo encuentran cuando han devorado su presa, sin conciencia; los hombres no lo encuentran porque en ese momento se interesarían por los otros, pero el interés por el género humano o es de verdaderos canallas, de aquellos que fingen altruismo, o de verdaderos santos, los cuales muy escasas veces sobreviven a la rapacidad o a sí mismos.

Capítulo I: En el que se narra cómo las desventuras de un niño pueden estropear la adolescencia de un hombre

Había preferido creer hasta el día de su muerte que estaba al margen de su tiempo, de la humanidad misma. Lo había creído desde que tenía conciencia del medio en que había nacido, desde que desconocía el significado de la palabra ‘creer’.